SOMOS POLVO DE ESTRELLAS

SOMOS POLVO DE ESTRELLAS

10 de septiembre de 2011

MUERTE UNIVERSO

El universo es un complejo de fenómenos de magnitud que el hombre busca resolver mediante la ciencia. Hoy se sabe que empezó hace uno 13700 millones de años. A partir de allí se encuentra en un proceso de expansión y es aquí donde aparece el concepto de espacio tiempo. A modo de ejemplo: cuando inflamos una bomba, el estiramiento de sus componentes elásticos va alejando todos aquellos, hasta que llega un momento en que ya no es posible más expansión y revienta. Algo similar ocurre con el universo actual.

En cada uno de los confines se encuentran unos cúmulos de soles o estrellas y muchos de estos tienen planetas girando alrededor. Estos cúmulos son las llamadas galaxias y nosotros pertenecemos a la galaxia de la vía láctea.

El hombre hace parte de aquel universo, de aquel engranaje de fenómenos y de leyes que lo determinan. Frente a la vastedad de este océano cósmico al ser humano le preocupa su muerte, su propia muerte como ser biológico, pero en la comprensión del cosmos, los fenómenos se dan, se construyen y se destruyen en el espacio tiempo.

De las nebulosas, conjunto de gases estelares y de fragmentos, siguiendo leyes universales, nacen nuevas estrellas, nuevos planetas. Todo parece un eterno retorno. A nuestro sol le queda una vida de unos 5000 millones de años, en su fin se convertirá en un cuerpo frío que explotará y sus gases o componentes finales serán la materia prima para el nacimiento de otra estrella.

Parece que la muerte no existe en el universo, todos sus elementos o componentes pasan de un ser a un no ser y de no ser a ser. Es una eterna transmutación en donde ocurren colisiones severas, estallidos de luz y manifestaciones violentas que se traducen en descargas inmensas de energía. En otros términos el universo respira y se reacomoda en su proceso de expansión.

En un respiro del cosmos apareció la vida en la tierra; somos consecuencia del polvo de las estrellas. Hubo un día en que la materia tomó conciencia de sí misma y apareció el hombre. En el momento actual se mueve buscando las autopistas del cielo, los caminos por donde se manifiesta la naturaleza.

Sabemos que nuestro cuerpo está formado por carbono y otros elementos que se han cocinado en las estrellas. Hemos recibido de su fin y de su proceso de reiniciación universal todo el material y la energía para comprender su magnitud y entender que el universo existe.

Hoy podemos aceptar nuestro origen a partir de la gran explosión generada en el Big Bang, teoría que ha sido confirmada por la ciencia. El universo se expandió a partir de un volumen infinitamente pequeño pero con densidad y temperaturas muy altas.

En esta tierra, como habitante, me identifico con Terry Pratchett: “En el principio no había nada, entonces explotó”. Me afianzo en el concepto inicial: la muerte no existe en el universo porque la nada explotó para nacer nuevamente.