Las cosas que hacemos no (siempre) son las que marcan una diferencia en
nuestras vidas; es frecuente que las cosas que evitamos realizar son las que
causan el mayor impacto.
Vivir en el pasado
Individuos mentalmente fuertes se
centran en el momento presente y en el futuro próximo. Ellos entienden que el
pasado esta fuera de su alcance y que el futuro lejano es demasiado
impredecible como para tenerlo en cuenta.
Permanecer en la zona de confort
La zona de confort es un lugar
peligroso, un oscuro abismo donde cualquiera que permanece allí por mucho
tiempo se termina perdiendo. Mantenerse dentro de la zona de confort es
renunciar a la vida.
Omitir las opiniones de los demás
Sólo los necios creen ser
suficientemente buenos en todos los aspectos. Cuando se trata de una lluvia de
ideas, éstas pueden ser tan forzadas como capturadas. Una buena idea es una
buena idea, independientemente de si se me ocurrió a mí o no. No dejes que tu
ego saque lo mejor de ti; si alguien te ofrece un consejo, tómalo.
Evitar el cambio
Lo que la gente mentalmente
fuerte entiende y los demás, no es que el cambio es inevitable. No tiene
sentido tratar de evitar lo inevitable. Por lo tanto, tratar de evitar el
cambio no tiene sentido; es una mera pérdida de tiempo y energía.
Mantener una mente cerrada
Uno nunca sabe todo. Incluso las
cosas que uno cree saber, posiblemente no sean totalmente verdaderas. Si uno
mantiene una mente cerrada, uno se impide a sí mismo aprender nuevas cosas. Si
dejas de aprender, dejas de vivir.
Dejar que los demás tomen decisiones por ellos
Solo usted debe tomar sus propias
decisiones; no podemos permitir que otros las tomen por nosotros. Todo lo que
esto hace es trasladar la responsabilidad de uno hacia otra persona, pero al
final quien termina fracasando es uno mismo.
Ponerse celoso por el éxito de los otros
Uno debería ponerse feliz cuando
los demás tienen éxito. Si ellos pueden lograrlo, uno también puede. El éxito
de los demás no significa, de ninguna manera, que se disminuyen las
probabilidades de que usted tenga éxito. En todo caso, esto nos debe motivar
para seguir empujando hacia adelante y, así, conseguir el éxito.
Pensar en las posibilidades de fracaso
Nuestros pensamientos controlan
nuestra perspectiva; nuestra perspectiva controla nuestro éxito. La gente
mentalmente fuerte entiende esto y lo usa a su favor. Siempre existe la
posibilidad de fracasar, pero mientras existe la chance de triunfar, vale la pena
hacer el esfuerzo.
Sentir pena por sí mismos
Cosas malas siempre suceden. La
vida puede ser muy dura. La gente se lastima; otros mueren. La vida no es todo
color de rosa. Uno se caerá del caballo una y otra vez. La cuestión es si uno
es lo suficientemente fuerte como para volver a levantarse.
Tratar de complacer a la gente
Un trabajo bien hecho es un
trabajo bien hecho, sin importar quién esté juzgando el producto final. Uno no
puede complacer a todo el mundo, pero siempre podemos hacer nuestro mayor
esfuerzo.
Culparse a sí mismos por cosas que están fuera de su control
La gente mentalmente fuerte sabe
qué cosas puede controlar, y sabe lo que no puede controlar, y por eso, evita
pensar en lo que escapa de sus manos.
Ser impaciente
La paciencia no es solo una
virtud; es “LA” virtud. La mayoría de la gente no fracasa porque no es lo
suficientemente buena o porque es incapaz de triunfar. Esa gente falla porque
es impaciente y se rinde antes de tiempo.
Ser malentendido
La comunicación es clave para que
cualquier sistema funcione correctamente. Cuando se trata de personas, las
cosas se tornan un poco más difíciles. No es suficiente solo con entregar la
información; si los oyentes no te entienden, el mensaje no se recibirá
correctamente. La gente mentalmente fuerte realiza su mayor esfuerzo por ser
entendida, y además, tiene la paciencia necesaria para aclarar cualquier
malentendido.
Sentir que los demás están en deuda contigo
Nadie te debe nada en la vida.
Uno nace; lo que resta depende de nosotros mismos. La vida no nos debe nada.
Los demás no nos deben nada. Si uno quiere conseguir algo en la vida, solo te
lo debes a ti mismo; está en uno salir a buscarlo. En la vida, no existen las
limosnas.
Repetir los mismos errores
Comete un error una vez, está
bien. Comete el mismo error dos veces… no esta tan bien. Comete el mismo error
por tercera vez, deberías considerar alejarte del alcohol y las drogas. Tú eres
estúpido o estás bajo los efectos de la droga.
Ceder ante sus miedos
El mundo puede ser un lugar
escalofriante. Hay cosas que nos asustan y tenemos razón en tener miedo, pero
la mayoría de nuestros miedos son ilógicos. Si sabes que quieres probar algo,
pruébalo. Si tienes miedo, entiende que tener miedo al fracaso significa que
tener éxito es muy importante para ti.
Actuar sin pensar
La gente mentalmente fuerte sabe
que no debe apresurar sus decisiones. Si tienes el tiempo para reflexionar
sobre algo y cubrir todos sus aspectos, entonces hazlo. No hacerlo es pura
pereza.
Rechazar la ayuda de otros
Tú no eres Superman; no puedes
hacer todo. Incluso si pudieras, ¿por qué lo harías? Si otros te ofrecen su
ayuda, acéptala. Sé social. Escucha las ideas de los demás y observa cómo ellos
actúan. Puedes aprender algo. Si no, tú puedes enseñarles algo y hacer lo que
los humanos solemos hacer: sociabilizar.
Tirar la toalla (rendirse)
La mayor debilidad de los humanos
es rendirse –poner un punto final, tirar la toalla–. Las personas mentalmente
fuertes realizan las cosas de cierta manera. Solo haz las cosas que son
importantes para ti; olvídate de lo que no te importa. Si son importantes para
ti, persíguelas hasta tener éxito. Sin excepciones.
Gustavo Aldunate
http://www.elmostrador.cl/vida-en-linea/2014/09/04/20-cosas-que-la-gente-mentalmente-fuerte-no-hace/